Dejame que te cuente

una historia congelada

tan fría y tan dura

como la historia de tu vida

Y déjame que te cuente
el porqué de tu tristeza
sólo porque veo en tus ojos la tormenta


aunque en el camino te veo solitaria
tan triste y tan callada
noto en tu sonrisa una irónica desdicha
veo en tus labios la sangre de tu alma
y me quedo con la pena
de tan sutil herida


Déjame que te cuente una historia que te hechiza


sólo porque eres mi princesa porque eres parte de mi vida
dejame acercarme
tan sólo con la tinta
para verter la lluvia
y mezclarla con tu rima
para no perder el cielo
que te acerca a mi existir
para amarte de repente y jamas quererme ir
déjame cantarte una ultima poesía
déjame amarte aunque sea con mi voz
para que cuando veas esta irónica desdicha
sepas que soy tuyo por amor
aunque de mi te ausentes
en la historia de tu vida
jamás conozcas de éste trovador
déjame asombrarte con ésta irónica noticia
de que quisiera formar parte de tu amor
aunque sea sólo con la tinta
aunque sea sólo con mi voz

suena una canción cerca a aquella casa
abandonada y tan deseada
por la gente desahuciada
que la vigila sin dormir
suena una canción con un solo piano
y una melodía sale de su mano
como si una fiesta de los ricos
estuviera ahi pasando
suena una lluvia de verano
tan intensa como un frágil poemario
y de pronto se escucha el ruido de unos niños jugando
de pronto la luz del sol llegaba
y entrando hacia el fondo de la casa
mostró lo que en ella se guardaba
se revelo el secreto que la tenia tan de fiesta
pero ese misterio aun sigue sin mostrarse
pero quizás pronto va a mostrarse
pues la canción no provenía de esa casa
sino de una radio que tenía
una dama con sus hijos
en un humilde barrio al costado de esa casa