sabrá Dios la razón de tu locura
pues tú casi me haz matado
y con todo ésto
ahora estoy dañado
si la ilusión sólo fuese una amargura
no hubiese contemplado tu dulzura
por eso ahora entiendo
que no eres mi fracaso
por ello no te culpo
de tu traición ahora hecha
ya sé que no eres mi pareja
y tampoco la mujer que no me deja
pues contemplas mi lucero
sin abrir una ilusión
y me dices un te quiero
rompiendo el corazón
por eso yo me alejo
porque eres mi mal de amor
sin ver mi sentimiento
ya no eres mi ilusión
No hay comentarios:
Publicar un comentario